Con la búsqueda constante de estándares cada vez más altos de seguridad contra incendios, es natural que la industria centre sus energías en el desarrollo de soluciones sostenibles, de alta confiabilidad y eficiencia comprobada. En este contexto, la aplicación de hidróxido de magnesio como retardante de llama ya está emergiendo como una alternativa inteligente, práctica y de alto rendimiento a los procesos a temperaturas elevadas, ¡y en este artículo explicamos por qué!
La importancia de la resistencia térmica
Para aquellos que trabajan en la industria de compuestos termoplásticos y elastoméricos, no es nuevo que las funciones de retardo de llama y supresión representen un diferencial competitivo importante. Más que eso, también son parámetros indispensables para garantizar que estos componentes ofrezcan la resistencia necesaria en condiciones y procesos que impliquen temperaturas más altas y, en casos extremos, puedan minimizar las posibles situaciones de riesgo.
Después de todo, es bien sabido que los retardantes de llama son sustancias capaces de descomponerse cuando se exponen a altas temperaturas y promueven la disminución del calor y el aislamiento de la matriz, inhibiendo la propagación de las llamas. Es esta característica la que hace que estas sustancias sean ideales para aplicaciones en compuestos termoplásticos y elastoméricos, generalmente utilizados en la fabricación de materiales que son más propensos a cortocircuitos e incendios, como cables eléctricos y cables.
Pero, dentro del universo de posibilidades que ofrece la industria para satisfacer esta demanda, es igualmente importante saber elegir alternativas que, además de costo-beneficio, también garanticen una vida útil y resistencia superior sin renunciar a la sostenibilidad o la calidad durante todo el proceso de producción. Es en este contexto que entra en juego la aplicación de hidróxido de magnesio como retardante de llama.
Esto se debe a que, gracias a las características específicas del magnesio, este elemento tiene una alta resistencia térmica, siendo ideal para su aplicación en productos que necesitan pasar por procesos a altas temperaturas sin degradación o liberación del retardante. Para darle una idea, los materiales que llevan hidróxido de magnesio como retardante de llama en su composición pueden mantener la estabilidad a temperaturas de hasta 340°C.
Un resultado significativo, especialmente si tenemos en cuenta que el hidróxido de aluminio — la alternativa más común en el mercado al hidróxido de magnesio — pierde su estabilidad a 200°C, restringiendo su aplicación en matrices de polímeros que requieren altas temperaturas de procesamiento. Por lo tanto, el hidróxido de magnesio tiene una eficiencia retardante de llama 17% mayor que el hidróxido de aluminio.
La acción del hidróxido de magnesio como retardante de llama
En la práctica, el principio de acción del hidróxido de magnesio como retardante de llama es el siguiente: cuando se expone a temperaturas superiores a 340°C, el hidróxido de magnesio se descompone endotérmicamente, es decir, absorbe calor, generando vapor de agua y óxido de magnesio. Inicialmente, el vapor de agua de las moléculas de magnesio actúa directamente en la reducción del calor del medio y la supresión del humo generado. El óxido de magnesio recubre la superficie del material, formando una capa protectora que bloquea el contacto entre el oxígeno en el aire y el material combustible, evitando la propagación de llamas.
Sin mencionar que, debido a su naturaleza básica, el hidróxido de magnesio también ayuda a neutralizar los gases tóxicos que eventualmente pueden liberarse durante la combustión de polímeros, como el monóxido y el dióxido de carbono, el dióxido de azufre o los gases de óxido nítrico, que son bastante dañinos cuando se expulsan en cantidades significativas. ¡Todo esto en su forma más básica!
Además, debido a que no podemos olvidar que, dependiendo de la aplicación y el propósito, el hidróxido de magnesio todavía puede recubrirse en ácidos grasos, tales como estearina, de modo que actúa más intensamente en la dispersión de las matrices poliméricas, permitiendo que se use una mayor cantidad del material en la composición del polímero y reforzando los materiales en el alcance estructural.
Hidromag FR e Hidromag FRC: más seguridad y resistencia a sus aplicaciones
Ya se ha notado que, independientemente del escenario, el uso de hidróxido de magnesio como retardante de llama presenta una serie de beneficios prácticos que, desde una perspectiva técnica, ayudan a garantizar más seguridad y resistencia en sus diversas aplicaciones. Es por eso que, aquí en Bel Mag, las industrias tienen la línea Hidromag FR, formulada y desarrollada exclusivamente en la medida adecuada para proyectos exigentes.
Con un tamaño de partícula bajo, los productos Hidromag FR pueden incorporarse fácilmente en matrices poliméricas, mejorando el rendimiento sin comprometer la eficacia de la acción retardante. Además, debido a su origen natural, nuestros productos están 100% libres de halógenos, evitando la formación de gases ácidos durante la combustión del polímero y, en consecuencia, reduciendo las tasas de erosión en equipos y componentes.
En nuestro catálogo, se encuentra hidróxido de magnesio en las versiones Hidromag FR, con todos los beneficios que enumeramos anteriormente, e Hidromag FRC, que combina estas mismas características con el poderoso recubrimiento de estearina adicional, aumentando la dispersabilidad.
Y, por supuesto, al elegir la línea Hidromag FR, seguramente contará con soluciones de origen marino que brindan seguridad, reducción de costos y alto rendimiento a su proceso de producción de compuestos termoplásticos y elastoméricos. En definitiva, esta opción solo ofrece ventajas:
- Retardante de llama con una eficiencia hasta un 17% mayor que el hidróxido de aluminio;
- Supresor de humo con la formación de una barrera protectora;
- Libre de halógenos tales como cloruros, que causan corrosión;
- Estabilidad térmica a temperaturas de hasta 340oC;
- Capacidad para neutralizar los gases formados en la combustión del polímero, tales como C02, NOx, SO2 etc.
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